Muchas veces nos encontramos con alumnos que rehúsan el contacto físico, pero también encontramos situaciones en las que necesitamos regular ese contacto, ya que se produce cuando no es el mejor momento o con una intensidad que no es la adecuada.
Vemos niños que dicen te quiero a todo el mundo y todo el tiempo, otros que se sienten muy atraídos por los brazos ajenos y los tocan demasiado fuerte, demasiadas veces, o incluso a personas que no conocen.
Todas estas conductas deben ser atendidas y trabajadas ya que saber cuándo tocar es un requisito importante para integrarnos adecuadamente en la sociedad.
Pensando en las características de mi alumnado y sus necesidades he elaborado el siguiente material que sin duda será útil para trabajar este aspecto. Aquí lo tenéis para quien guste.
Clic aquí para descargar el genially en pdf.
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